Pero, para mi sorpresa, fue mucho lo que aprendí y mucho lo que la pasé bueno durante esta época. No sólo hay futbol en un mundial, también hay muchaaaa plata invertida en publicidad. Y souvenires muy bonitos tambien. Aprendí mucho, como que a veces hay que dar un paso en frente y ponerse la "10". Aprendí que hay que confundir para reinar. También, no soy la única que es demasiado buena y no es capaz de quebrar las reglas. Es bueno para algunas cosas tener un BB, malo es tenerlo descargado en día de partido. Ya puedo decir que conozco a una persona con hermana gemela -muy divertida y adorable por cierto-. Es posible hacer N mil cosas a la vez y seguir siendo y viendose, jóven y bella, aunque la persona a la que me refiero sea ocho años mayor que yo y me hallan dicho que me veo -sí, lo digo y se me da nada- más vieja. La maternidad puede pasar desapercibida -más actitud de madre tengo yo, o sino, recuerda mi comentario acerca del "solazo"-. Las verdades son mentiras, las mentiras verdades y a veces es lo contrario... aunque no se sabe cuando es qué, es siempre gracioso.
Muchachos, todos y cada uno de ustedes me enseñó algo y me fregó mucho, pero gracias a ustedes las jornadas fueron increíblemente divertidas y aún así, para la FIFA fuimos la comisión que MÁS trabajó. Gracias, por hacerme reír tanto, por enseñarme valiosas lecciones sin quererlo y por regalarme ratos que se van a quedar en mi memoria -como nuestras importantísimas reuniones en la alfombra, aunque a orgía suene- por siempre.
En este mundial poco futbol ví, pero mucho fue lo que reí. Y no me arrepiento de ello.
